"Todos queremos progresar. Pero progresar significa acercarse al lugar donde quieres estar. Y si te has equivocado de camino, seguir adelante no te acercará más. Si estás en el camino equivocado, el progreso significa dar un giro y regresar al camino correcto y, en ese caso, el hombre que regresa antes es el hombre más progresista."*
Me encuentro en un proceso de rendición, no de derrota sino de confiar. Empecé el blog contándoles sobre una pregunta que Dios me hizo: "¿Y qué pasa si mi plan para ti no tiene que ver con tus ideas preconcebidas de éxito, sino en que estés en mi presencia, cerca de mí?" La pregunta de verdad me marcó, y desde ese momento he procurado vivir bajo ese principio. Sin embargo, con el transcurrir del tiempo me di cuenta que mis acciones reflejaban que había dejado de creer que el éxito de mi vida consiste en permanecer y estar cerca del Espíritu Santo, y que todo lo demás es extra.
El Espíritu Santo ha traído a luz pensamientos enraizados en mi corazón que se oponen a esa verdad. Me mostró que en la cotidianidad mis acciones evidencian que permanecer no ha sido prioridad porque en el fondo de mi corazón aún prevalece la convicción de que hay "algo" que es más importante, acompañado de la creencia de que solo cuando lo alcance estaré feliz y satisfecha. Siendo vulnerable, ese "algo" para mí ha sido el deseo de tener influencia, de ser aceptada y reconocida. Diría que los deseos en sí mismos no son malos, el problema es el lugar que les he dado en mi corazón.
La línea de una canción me ayudó a entenderlo mejor, porque fue como "Mishi, ¿de verdad crees que no hay lugar más alto y más grande que estar a los pies de Jesús? Y aunque en el momento la respuesta honesta era que no, el anhelo de mi corazón es que sí sea así para toda mi vida. Así que es en este proceso que surge la idea de la nueva serie "cultura: repiensa lo que piensas y valoras", basada en Romanos 12:2 (TPT): "Deja de imitar los ideales y opiniones de la cultura que te rodea, más bien se transformado interiormente por el Espíritu Santo a través de una reforma total de tu forma de pensar."
En las próximas publicaciones compartiré sobre cómo ha sido y está siendo este proceso para mí en relación a ideas que yo he tenido con respecto a algunos temas y lo que el Espíritu Santo me ha mostrado al respecto. El objetivo es que a la luz de la palabra de Dios repensemos lo que pensamos y lo que valoramos en la vida, y si hay algo que no está bien, permitir que el Espíritu Santo, y la cultura del cielo moldeen nuestro sistema de valores que, en última instancia influencia la forma en que vivimos.
"Es importante encontrar las áreas de nuestra vida dónde ignoramos la verdad, o dónde la estamos manejando mal a través de la incredulidad. Independientemente de cuánto tiempo lleve, vale la pena no tener que cargar más el peso del engaño en nuestros pensamientos."*
*C.S. Lewis
*Bill Johnson
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